Para todos aquellos que disfruten de la tranquilidad y calma de cementerios; ya sea porque alli se encuentran nuestros seres queridos o simplemente encuentras arquitecturas armoniosas:
Los cementerios fueron y son un lugar de respeto, valoración de la vida y dolor;tambien son lugares para orar y sentirse cerca a Dios. En el cementerio de Chilecito reza "Aqui la cuna de otra vida empieza y tumba santa de los hombres es, aqui se premia el valor y la pureza; aqui al entrar ante tu Dios te ves" una hermosa y célebre frase de Joaquín V Gonzalez que refleja exactamente el lado espiritual de dichos lugares.
Me propongo con esta sección de a poco ir conociendo desde los mas famosos cementerios hasta los mas olvidados, rescantando el espiritu de los mismos.Porque desde siempre la muerte fue una incógnita, tanto que se construyeron grandisimas obras en pos de la próxima vida.
HOY : CEMENTERIO DE LA RECOLETA
Ha sido distinguida con el auspicio del Ministerio de Cultura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, mediante Resolución Nº 534 de fecha 18 de mayo de 2006, en la cual se considera: "Que es dable reconocer la importante labor de quienes contribuyen a difundir el valor patrimonial que hace a la identidad histó-
rica y edilicia de los barrios portLa vida y la muerte
Recoleta, un barrio tan ambivalente,
por un lado la vida, por el otro la muerte.
Bares, restaurantes, parques florecientes,
feria de artesanos, risas de la gente.
La muerte los mira silenciosamente,
paz del cementerio, del lado de enfrente.
Detrás de sus muros reposa el valiente,
poetas, deportistas, varios presidentes,
atrapa el misterio de jóvenes niñas,
de historias de amor y bellas durmientes.
Angeles custodian sus sueños truncados,
reposan espadas que tanto han luchado,
laureles coronan las glorias logradas
palmas de maritirio, lágrimas amargas.
Un ancla pretende afirmarse en la tierra,
ignora el misterio que la muerte encierra
y un Cristo que observa con dulce mirada
bendice a quien llega a su eterna morada.
Susana Espósito
Guía de Turismo de la ciudad de Bs. As.
Antiguamente, los muertos eran inhumados en los llamados "camposanto", en la parte posterior de las iglesias y las personalidades importantes en el interior de las mismas
En 1820, durante el gobierno de Martín Rodríguez y su ministro, Bernardino Rivadavia, fueron expropiados los terrenos ocupados por el huerto de la Congregación Franciscana, siendo destinados a la construcción del Cementerio del Norte (el primer cementerio público en la ciudad de Buenos Aires).
¿Qué significa la palabra "cementerio" en español?
Antes del cristianismo al lugar donde enterraban a los muertos se le llamaba "necrópolis" (ciudad de los muertos, en español).
La palabra cementerio viene del griego (koimeterion) y en español significa "dormitorio". Esta palabra fue introducida por los cristianos, con la esperanza cristiana en la resurrección.
De ahí que los cristianos decimos que los muertos están "descansando en paz" a la espera de la resurrección.
El Ingº Próspero Catelín se ocupó del proyecto del Cementeriodel Norte, que en principio era solo para católicos, siendo inaugurado en el año 1822.
Los primeros en recibir sepultura fueron una joven uruguaya llamada Dolores Maciel y un joven, párvulo liberto llamado Juan Benito.
En 1863 el presidente Mitre firmó un decreto que permitía que fuesen enterrados los practicantes de otras religiones.
Con el tiempo, el cementerio del Norte llegó a un estado de abandono hasta que en 1880, el primer Intendente de la ciudad de Buenos Aires, Torcuato de Alvear, encomienda al Arq. Buschiazzo, su remodelación.
Se pavimentaron sus calles, se rodeó con un muro de ladrillos y se embelleció con un pórtico de entrada con doble hilera de columnas de fuste acanalado de orden dórico.
En el friso se destacan 13 alegorías, símbolos de la vida y de la muerte.
El Cementerio del Norte ocupa actualmente cuatro manzanas y cuenta con alrededor de 6000 sepulcros a perpetuidad. Más de 70 bóvedas fueron declaradas Monumento Histórico Nacional y el Cementerio en sí es considerado Museo Histórico Nacional desde el año 1946, por los personajes ilustres que aquí descansan, por la calidad arquitectónica y por sus magníficas esculturas.
Es uno de los más importantes del mundo junto con el de Staglieno* en Génova y el Père Lachaise* de París.
Al ingresar al peristilo se observan en el piso tres fechas: 1822 (año de creación del cementerio),1881 (fecha de su primera remodelación ) y 2003 (tercera remodelación).
A la derecha se encuentra una capilla dedicada a la religión católica, en cuyo altar se observa un Cristo realizado en mármol de Carrara blanco de una sola pieza por el escultor italiano Giulio Monteverde (quien fue maestro de Lola Mora). Debajo, en el altar realizado en granito, se lee la siguiente frase: "Ego sum resurrectio et vita" (Yo soy la resurrección y la vida). En el peristilo, frente a la capilla, se halla un púlpito utilizado para ceremonias practicadas por otros cultos.
Texto: Susana Espósito
http://www.cementeriorecoleta.com.ar/index.html
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